1. ¿A qué fue el papa Ratzinger a México y Cuba? Sin consecuencias. Si la iglesia católica no se renueva seguirá perdiendo adeptos. Ausencia de carácter y juventud.
2. Incaut@s quienes se dejaron torpemente embobar por de la engañosa y vanidosa, publicidad de la Grisales y Revertrex. No envejecer es mejor no haber nacido.
3. Nos hastiamos de la lora del ex guerrillero Petro con su Twitter y su afán de hacerse oír. El turno ahora para el estadio bogotano y Paul McCartney. ¡No más!
4. La Cumbre de las Américas en Cartagena será “otra más”. Venga quien venga o no a Colombia. Ni las pataletas de algunos -Correa- hará que sea diferente.
5. ¡Qué vergüenza para nuestro Valle del Cauca! Golpe tras golpe. Responsable: la mayoría que en elecciones deja que otros voten por todos. Ahí el resultado. Useche.
6. Y pensar que dizque querían invitados especiales y premios de paz para la liberación de los secuestrados. Sigue dándose vitrina la vocera de las Farc. Córdoba.
7. La tabla de posiciones en el fútbol profesional colombiano no es por falta de calidad de los equipos. Es la realidad una vez comenzó la limpieza (narcotráfico).
8. Sin duda el argentino Lionel Messi del Barcelona F.C. es, hoy, el mejor futbolista del mundo. No obstante, ¡qué lejos está del Rey Pelé! O Rey.
9. Quienes se la pasan criticando la programación de RCN Televisión y Caracol Televisión. No se estresen: apaguen el televisor o cambien de canal. Es tan fácil.
10. Duele ver el estado actual de la caficultura colombiana después de haber sido durante décadas la columna vertebral de la economía nacional.
11. Los periodistas que se las dan de independientes y neutrales criticando la compra de El Tiempo por Luis Carlos Sarmiento Angulo. Entonces que lo compren ellos.
miércoles, 28 de marzo de 2012
sábado, 3 de marzo de 2012
LA OTRORA MAJESTAD DE LA JUSTICIA
Quizá fue la Corte Suprema de Justicia del entonces holocausto (1985) la que encarnó hasta hoy la verdadera y última majestad de uno de los tres poderes públicos en Colombia.
Los hechos de los años recientes demuestran que muchos colombianos perdimos la credibilidad, el respeto absoluto y la confianza que otrora nos brindaban jueces, abogados, fiscales e integrantes de la rama judicial.
Lo más reciente es el tristemente célebre episodio de la compleja elección, controvertida gestión y ahora renuncia de la Fiscal General de la Nación, Vivian Morales.
Produce vergüenza que el Consejo de Estado anule una determinación de la Corte que deja entrever que efectivamente su mamadera de gallo en elegir el sucesor de Mario Iguarán fue política y en contra del ex presidente Álvaro Uribe.
Los escándalos del Consejo Superior de la Judicatura y el horrible carrusel de las pensiones de magistrados, amigotes, amigotas y familiares, produce asco y dejan al descubierto que huele mal por dentro el sector de la justicia.
Todo son contar los tentáculos del narcotráfico, los grupos de paramilitares y corruptos de cuello blanco, con la anuencia de muchos abogados, que lograron permear muchas esferas de la hoy cuestionada justicia en Colombia.
¡Cómo añoramos la majestuosidad, pulcritud, rectitud, transparencia de un Reyes Echandía como presidente de la Corte Suprema de Justicia que aniquiló el M-19 en su cruenta toma.
En un país en el que clamamos justicia y la justicia se derrumba.
Los hechos de los años recientes demuestran que muchos colombianos perdimos la credibilidad, el respeto absoluto y la confianza que otrora nos brindaban jueces, abogados, fiscales e integrantes de la rama judicial.
Lo más reciente es el tristemente célebre episodio de la compleja elección, controvertida gestión y ahora renuncia de la Fiscal General de la Nación, Vivian Morales.
Produce vergüenza que el Consejo de Estado anule una determinación de la Corte que deja entrever que efectivamente su mamadera de gallo en elegir el sucesor de Mario Iguarán fue política y en contra del ex presidente Álvaro Uribe.
Los escándalos del Consejo Superior de la Judicatura y el horrible carrusel de las pensiones de magistrados, amigotes, amigotas y familiares, produce asco y dejan al descubierto que huele mal por dentro el sector de la justicia.
Todo son contar los tentáculos del narcotráfico, los grupos de paramilitares y corruptos de cuello blanco, con la anuencia de muchos abogados, que lograron permear muchas esferas de la hoy cuestionada justicia en Colombia.
¡Cómo añoramos la majestuosidad, pulcritud, rectitud, transparencia de un Reyes Echandía como presidente de la Corte Suprema de Justicia que aniquiló el M-19 en su cruenta toma.
En un país en el que clamamos justicia y la justicia se derrumba.
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